Glosas | Vereda Sur
«Saludamos, desde estas páginas, la aparición de este libro que será el primero de muchos -esperamos- de este grupo literario que, durante la primera década de este siglo, nos entregó una brisa de aire fresco que a muchos nos remeció, gracias a su revista y a sus publicaciones alejadas de la oficialidad.» El sábado 22 de abril del 2023, en el Liceo de Aplicación de Santiago, se llevó a cabo el lanzamiento de la antología de poesía y cuento “Vereda Sur”. La ceremonia se realizó en el establecimiento vecino al casco histórico, pues fue allí donde funciona -desde el 2019- un taller literario dirigido por el poeta Maximiliano Díaz Santelices, cuyos integrantes participaron de esta publicación. El libro, por lo tanto, es el producto del trabajo de cada uno de los autores, en su gran mayoría inéditos, quienes decidieron dar a la imprenta sus textos, para que trascendieran el estrecho círculo de sus reuniones semanales. Por otra parte, la obra es la primera publicación de Ediciones Esperpentia -en su segunda temporada- y el diseño, incluida la portada -muy bella-, fue hecha por el poeta, narrador y editor Sergio Sarmiento Monje. Saludamos, desde estas páginas, la aparición de este libro que será el primero de muchos -esperamos- de este grupo literario que, durante la primera década de este siglo, nos entregó una brisa de aire fresco que a muchos nos remeció, gracias a su revista y a sus publicaciones alejadas de la oficialidad. Volviendo a “Vereda sur”, debemos decir que el grupo de escritores y escritoras está conformado por personas de distintas esferas profesionales (profesores, abogados, periodistas, psicólogos, estudiantes, administrativos, etc.), algunos con poco más de 20 años, otros cercanos a los 50. Con miradas y poéticas diversas, algunos con una vocación literaria ya perfilada, otras aún en una búsqueda. En este sentido, hay un cruce muy post moderno de estilos e intenciones, tolerándose mutuamente, sin anularse y sin tratar de imponerse, conviviendo en el caos de lo diverso. Por esta razón “Vereda Sur”, como cualquier antología, nos muestra un variopinto grupo dedicado a la Literatura que con diferentes brochas o pinceles finos -desde un realismo duro hasta textos simbólicos u oníricos, pasando por algunos que a través de un orden clásico abordan situaciones complejas, a otros de visiones fragmentarias que muestran la diversidad del mundo; pero cada uno, poseedor de una mirada que indaga y cuestiona aquello que convencionalmente llamamos “realidad”, tratando de penetrar su volátil esencia, desplegando las formas con un lenguaje artístico- pintan en monocromías o con los más abigarrados colores la página en blanco, creando composiciones múltiples. ¿Quiénes son los autores incluidos en la antología? Respondiendo esta pregunta, que el lector ya se estará haciendo, paso ahora a dar una breve mirada a cada uno de ellos y ellas, así como a sus obras: Luciano Alarcón, nos presenta un relato minimalista con un lenguaje preciso de referencias oníricas. Andrés Barahona, sus cuentos indagan con habilidad en lo perverso, con un penetrante lenguaje, no carente de humor negro. Federico del Río, poeta y narrador, busca con eficacia entre los intersticios de la compleja existencia humana. creando inquietantes imágenes. Catalina Echeverría, publica cuentos con un notable uso del lenguaje, creadora de inquietantes imágenes. Macarena Fevre, poeta y narradora de cuentos breves y de hallazgos luminosos. María Pía Jara, en sus cuentos aparecen personajes muy bien perfilados enfrentados a situaciones límites, a la locura de existir. Felipe Morales, ha creado cuentos de gran factura técnica, que surgen de la observación penetrante y aguda de la realidad. Rodrigo Rojo, sus relatos operan como memoria de la historia reciente de Chile, con gran mordacidad crítica. Tomás Veizaga, con un gran manejo del lenguaje en cuentos donde no sobra ni falta nada. Preciso y crítico. Cristian Villouta, poesía sardónica y satírica de la contingencia. Estos son los autores y -en su mayoría- sus primeras obras publicadas. Y como alguien dijo, por ahí, el tiempo dirá, el tiempo -el mejor crítico- hará su propia Antología y quizá algunos de ellos sobrevivan y su obra perdure, más allá de las breves páginas de este libro.
